Algunos de los efectos del consumo de marihuana de forma continua todavía se encuentran en estudio. Sin embargo, un artículo del profesor de Fisiología General y Buco Dental de la Facultad de Odontología de Udelar. Dr. en Odontología Enrique Rotemberg Wilf, señala algunos efectos en la salud bucal que ya se están percibiendo en la población que comienza a temprana edad con el consumo de esta sustancia.
La marihuana, también conocida como cannabis, es una planta que contiene sustancias químicas llamadas cannabinoides. El principal cannabinoide psicoactivo presente en la marihuana es el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC), que es responsable de los efectos psicoactivos o «pegue» asociados con su consumo. Su legalidad y regulación del consumo de marihuana varían según el país y la jurisdicción. En algunos lugares, la marihuana se utiliza con fines recreativos o medicinales, mientras que en otros su uso puede estar prohibido o restringido. En 2013 el Gobierno de Uruguay promulgó una ley para reglamentar el cultivo de la planta de cannabis, la producción, la venta en farmacias y el uso de cannabis con fines recreativos para usuarios mayores de edad inscriptos en un registro, cuyos efectos en la prevalencia de consumo y en la percepción de riesgo deberán ser evaluados a mediano y largo plazo.
Fumar en general, ya sea tabaco o marihuana, puede tener efectos perjudiciales para los dientes y las encías. La inhalación de humo puede provocar sequedad en la boca, lo que aumenta el riesgo de desarrollar caries, enfermedades de las encías y mal aliento. Además, el humo del cannabis contiene subproductos de combustión que pueden manchar los dientes con el tiempo.
Algo más que una planta
La Marihuana contiene unas sustancias que alteran las funciones del cerebro como la coordinación, los reflejos, incrementa el ritmo cardiaco y la presión sanguínea y sobre todo disminuye el flujo salival. En adictos a marihuana se puede observar en mayor medida caries, inflamación o infección de las encías, queilitis en las comisuras labiales y afectaciones cutáneas en la cercanía de la boca. Según el Dr. Rotemberg Wilf las probables causas de la mayor presencia de estas consecuencias en la salud bucal están relacionadas a la naturaleza ácida de la droga, la sequedad bucal, la propensión al consumo de gaseosas y refrescos, el apretamiento y rechinamiento dentario y períodos prolongados de higiene oral deficiente.
Queilitis es otra forma de llamar a los labios agrietados. Los labios se secan, se descaman y pueden aparecer grietas verticales dolorosas. La piel de alrededor de los labios también se puede irritar. Esta sequedad causa sensaciones incómodas de quemazón.
Las personas jóvenes en tratamiento por dependencia a las drogas perciben el deterioro de su salud bucal a partir de la situación de consumo, alterando la autoestima y las funciones orales como masticación, gusto y estética. Comúnmente la asistencia odontológica se asocia a situaciones de urgencia, sin cumplir controles periódicos.
El escaso cuidado bucal por parte de los sujetos consumidores de sustancias psicoactivas evidencia una alta prevalencia de caries dental seguida de enfermedad periodontal; lo que aumenta el riesgo de pérdida de órganos dentales, disminución de la función masticatoria y por ende deterioro de la calidad de vida.
Además del fumar, el consumo de comestibles de marihuana (como galletas, brownies, etc.) puede contribuir a la caries dental. Muchos de estos productos son ricos en azúcar, y el consumo frecuente de alimentos azucarados aumenta el riesgo de desarrollar caries.
Sería conveniente proponer estrategias para que el profesional odontólogo y su equipo auxiliar les brinden una atención especial centrada en la prevención y promoción de salud a estas personas como parte del tratamiento por drogodependencia.
Es importante recordar que los efectos de la marihuana pueden variar de una persona a otra, y que los factores individuales y el estilo de vida también pueden influir en la salud bucal. Es importante que las inquietudes específicas sobre cómo el consumo de marihuana puede afectar los dientes, sea consultado directamente con un odontólogo para poder obtener información y un asesoramiento personalizado.